Reseña Un canalla siempre es un canalla, Sarah MacLean

Hola holaaaaaaaaaaaa

Aquí vengo con otra reseña de una de mis últimas monosas lecturas *_____*

Un canalla siempre es un canalla

Autora: Sarah MacLean
Editorial: Versátil
ISBN:  978-84-941205-6-5
Páginas: 408

Edición: Tapa blanda con solapas

Sinopsis:

Lo que un canalla quiere, lo consigue…

Diez años atrás, el marqués de Bourne fue expulsado de la sociedad sin nada más que su título. Ahora, propietario del club de juego más exclusivo de Londres, el frío y cruel Bourne está dispuesto a hacer lo que sea necesario para recuperar su herencia. Incluso casarse con la perfecta lady Penelope Marbury.

Un compromiso roto y años sufriendo decepcionantes cortejos, han provocado que Penelope pierda cualquier clase de interés en un matrimonio convencional y tranquilo, quiere algo más. Sin duda es una suerte que su recién estrenado marido esté en disposición de mostrarle un nuevo mundo de placer.

Es posible que Bourne sea el príncipe de la decadencia en los bajos fondos londinenses, pero se ha jurado a sí mismo que mantendrá a Penelope al margen de toda aquella perversidad. Algo que va a suponer todo un reto cuando ella descubra el deseo y se atreva a apostarlo todo por él, incluso su corazón.

 
     

Sarah MacLean creció en Rhode Island, obsesionada con la novela romántica histórica y lamentando el hecho de haber nacido mucho tiempo después de poder participar en el debut de la temporada. Su amor por la historia la impulsó a licenciarse en el Smith College y en Harvard University, antes de decidirse, por fin, a coger pluma y papel y escribir su primera novela.

Sarah vive ahora en la ciudad de New York con su marido, su perro y una impresionante colección de novelas románticas. 

En España, puedes seguir las noticias sobre sus libros, participar en concursos y compartir tu afición en el grupo de FACEBOOK: “Fans de Sarah MacLean”. Con su anterior trilogía Love by Numbers recogió multitud de premios tanto nacionales (DAMA, ROSAS, RINCÓN ROMÁNTICO), como internacionales.

A Sarah le encanta saber lo que opinan sus lectores, así que no olvides visitarla en:
www.macleanspace.com

   

Hace un año más o menos que Versátil anunció por facebook que había comprado los derechos en castellano de A Rogue by Any Other Name y yo me emocioné como una niña pequeña porque por fin podría volver a leer una nueva novela de esta autora que tanto consiguió enamorarme con su trilogía Love By Numbers. 

En Un canalla siempre es un canalla dejamos de lado a los hermanos St. John a los que tanto cariño llegué a cogerles con sus respectivas novelas y nos vamos unos años después, concretamente a 1831, para situarnos en Surrey junto a Lady Penelope Marbury, una de las hijas del marqués de Needham y Dolby, la cual, a sus veintiocho años, todavía no ha encontrado un marido tras el compromiso fallido hace años con cierto duque del que ya habréis oído hablar si habéis leído su anterior trilogía.

Su amigo más antiguo le miró con desamparo al tiempo que alzaba las manos. Tommy dependía de su padre. De su dinero, de su apoyo.

«Algo que él ya no tenía».

El odio resurgió más brillante y ardiente que antes, pero lo apagó con fría determinación. Guardó la moneda en el bolsillo y dio la espalda a sus iguales, a su club, a su mundo y a la vida que siempre había conocido.

Para sus adentros, juraba venganza.

A pesar de parecer una chica perfecta a los ojos de los demás, Penelope se siente prisionera dentro de su propio mundo. Le gustaría poder salir de él y encontrar un marido que la dejase ser ella misma. En realidad, lo único que quiere es casarse por amor, algo que ya tiene asumido que va a resultarle muy complicado por la edad que tiene y el escándalo de su compromiso fallido a sus espaldas.

Pero cuando vuelve a aparecer en su vida su amigo de la infancia, el marqués de Bourne, Michael, el cual abandonó Surrey cuando perdió todo su dinero y sus posesiones jugando a las cartas años atrás y que ahora, diez años después, es uno de los propietarios de El ángel caído, el club de juego más exclusivo de todo Londres y dispuesto a casarse con ella para recuperar su herencia, Penelope descubre que quizás no deba darlo por perdido, que todavía pueden quedarle aventuras por vivir.

Se preguntó qué más podría hacer ella si se dejaba llevar por la respuesta del placer. Una imagen apareció en su mente; cabellos rubios desparramados sobre unas oscuras sábanas de seda, unos ojos azules como el cielo brillando por la sorpresa mientras él brindaba a la correcta y remulgada Penelope un atisbo de placer embriagador.

Había estado a punto de besarla en la oscuridad. Lo que comenzó como una manera de intimidarla, de comprometer sin piedad a la tranquila y modesta Penelope Marbury estuvo a un tris de transformarse por completo. No pensaba negar esa evidencia mientras la miraba en la cocina de su viejo hogar, preguntándose a qué sabría su boca; cómo sonaría su respiración contra la piel; cómo sería sentirla contra él… alrededor de él.

La novela está narrada desde el punto de vista de ambos, tanto de Penelope como de Michael, un gran punto a su favor, pues gracias a eso podemos descubrir qué es realmente lo que desean ambos a pesar de no decirlo abiertamente al otro y le da muchísima más emoción porque sabes lo que podría suceder si se dejasen llevar, pero te pone de los nervios porque ves que no lo hacen.

Es quizás una de esas historias que tienen un planteamiento sencillo, que sabes que tiene que acabar de cierta manera porque además, a pesar de tener más libros en la serie, la historia de Penelope y Michael queda cerrada en una sola novela, pero que consigue enamorar por esos momentos tan emocionantes que aparecen página tras página, ese toque de humor tan característico que tiene esta autora y que tanto me gusta y esos personajes que aunque parezca mentira, poco a poco se hacen notar y consiguen mantenerse en tu recuerdo por mucho tiempo que pase.

Estaba casada.

Lo que la convertía en… la marquesa de Bourne.

Lo que explicaba por qué… viajaba en un vehículo con todas sus pertenencias y que pronto se instalaría en Londres, donde viviría con su recién estrenado marido.

Y eso indicaba que… Michael era su marido.

Lo que significaba que… iba a pasar su noche de bodas con Michael.

<<Quizá él volverá a besarte. Volverá a tocarte>>.

<<… o algo más>>.

A pesar de ser una novela que ha llegado a gustarme mucho, quizás porque acababa inevitablemente comparándola con los otros libros de Sarah, he visto que no ha llegado a convertirse en uno de mis favoritos. Creo que para mí no habrá ninguno como el primero de nueve reglas, ese libro tiene un hueco en mi corazón desde que lo leí.

Me habría gustado ver mucho más de Penelope y Michael y vivir más dentro de El ángel caído. Realmente me he quedado con ganas de más. Es como cuando te das cuenta de que estás empezando a disfrutar algo y puf, se acaba. Y si encima te deja con ese epílogo y éste te lleva a pensar que todavía habrá que esperar más para poder seguir leyendo otro libro de la serie, pues consigue que se te caiga hasta una lagrimilla de la impotencia.

Un canalla es un canalla es una de esas novelas que debes leer sí o sí si te gustan las novelas románticas históricas. Es una de esas que no te dejan indiferente, con una historia que va mejorando por momentos, unos característicos toques de humor, amor y mucha, mucha pasión.

4/5

     

Nos leemos!!

Muchas gracias a la editorial por el envío del ejemplar