¡Hoy viene la reseña de la cuarta y última parte de una de mis sagas juveniles favoritas! (cuidado con leer la sinopsis si no habéis leído los libros anteriores)
Empiezo a escribir esta reseña un día después de haber terminado el libro. Sí,
ya sé que es una frase un poco extraña para empezar una reseña, pero creo que
es algo imposible ponerse a escribir una reseña a las tantas de la madrugada,
cuando precisamente al día siguiente tienes que ir a la universidad y lo último
que quieres y puedes hacer es irte a dormir porque tienes los nervios a flor de
piel y la adrenalina por las nubes tras acabar un libro que te ha encantado de
principio a fin.
Con este relato, al igual que con el de Travesía de Invierno, la autora no
aporta nada nuevo a la historia principal, pero creo que no soy la única si
afirmo que adoro que los escritores escriban este tipo de historias entre libro
y libro, pues muchos de ellos están dedicados exclusivamente a sus lectores. Además,
en este sentido la autora va más allá, pues la dedicatoria de The Iron Knight
es un claro ejemplo de lo mucho que llegamos a importarle: “Esto es para
vosotras, Team Ash”. (Insertar gritito de emoción aquí).
Ash es un personaje que ya adoraba de las tres primeras novelas y con ésta
ha conseguido que me quede más prendada de él, si es que eso es posible. Eso sí,
aunque Puck también me gusta muchísimo y le tengo un cariño especial, el único
que consigue estar a mi parecer a la altura del principito, incluso llegar a
superarlo, es Grimalkin. Os lo prometo, adoro a este gato, es único.
Nos leemos!!
Autora: Julie Kagawa
Editorial: Darkiss
Páginas: 480
ISBN: 9788468735658
Edición: Tapa blanda sin solapasISBN: 9788468735658
Sinopsis:
“Mi nombre, mi Verdadero Nombre, es Ashallayn’darkmyr Tallyn, y soy el último hijo vivo de la reina Mab, soberana de la Corte Tenebrosa. Para ella, sin embargo, estoy muerto. Mi caída comenzó, como tantas historias, con una chica...”
“Mi nombre, mi Verdadero Nombre, es Ashallayn’darkmyr Tallyn, y soy el último hijo vivo de la reina Mab, soberana de la Corte Tenebrosa. Para ella, sin embargo, estoy muerto. Mi caída comenzó, como tantas historias, con una chica...”
Para Ash, el gélido príncipe de Invierno, el amor era una flaqueza propia
de humanos y de necios. O eso pensaba hasta que Meghan Chase echó abajo todas
sus barreras y Ash juró ser su caballero, ligándose así a ella de manera
irrevocable.
Cuando el País de las Hadas estuvo a punto de caer bajo el dominio de los
duendes de Hierro, Meghan segó limpiamente ese lazo para salvar la vida del
príncipe. Se había convertido en la Reina de Hierro, en la gobernante de un
país en el que ningún duende de Verano o de Invierno podía sobrevivir. Ash se
embarcó entonces en un viaje en busca de la única forma de cumplir su juramento
y regresar junto a Meghan.
Para sobrevivir en el Reino de Hierro, debía poseer un alma y un cuerpo mortales. Pero para conseguirlos tuvo que afrontar pruebas insalvables y descubrió, de paso, algo que lo cambiaba todo, una verdad que puso a prueba sus creencias más íntimas y le demostró que, a veces, es preciso algo más que valor para hacer el último y definitivo sacrificio.
Para sobrevivir en el Reino de Hierro, debía poseer un alma y un cuerpo mortales. Pero para conseguirlos tuvo que afrontar pruebas insalvables y descubrió, de paso, algo que lo cambiaba todo, una verdad que puso a prueba sus creencias más íntimas y le demostró que, a veces, es preciso algo más que valor para hacer el último y definitivo sacrificio.
Julie Kagawa nació en Sacramento, California. Con nueve años, ella y su familia se trasladaron a Hawai, lugar en el que descubrió a los grandes insectos carnívoros, colonias de lagartijas y los huracanes frecuentes. Pasó gran parte de su tiempo en el mar, menos cuando tenía que salir por culpa de los tiburones, las medusas y anguilas raras.
Cuando no estaba nadando por su vida, Julie se sumergia en los libros, a menudo para disgusto de sus profesores. Su amor por la lectura la llevó a escribir algunas historias muy oscuras y horribles, completas con ilustraciones a color, para sorpresa de sus maestros desventurados. Los cuentos sangrientos se fueron desvaneciendo con el tiempo, pero la pasión por la escritura se mantuvo, hasta que vendió su primer libro y se dedicó a escribir a tiempo completo.
Julie vive en Louisville, Kentucky, donde la frecuencia de los ataques de tiburones se encuentran en su punto más bajo. Ella vive con su marido, dos gatos molestos, y un pastor australiano demasiado inteligente para su propio bien, así como la última incorporación, un hiper-activa cachorra de Papillon.
Cuando no estaba nadando por su vida, Julie se sumergia en los libros, a menudo para disgusto de sus profesores. Su amor por la lectura la llevó a escribir algunas historias muy oscuras y horribles, completas con ilustraciones a color, para sorpresa de sus maestros desventurados. Los cuentos sangrientos se fueron desvaneciendo con el tiempo, pero la pasión por la escritura se mantuvo, hasta que vendió su primer libro y se dedicó a escribir a tiempo completo.
Julie vive en Louisville, Kentucky, donde la frecuencia de los ataques de tiburones se encuentran en su punto más bajo. Ella vive con su marido, dos gatos molestos, y un pastor australiano demasiado inteligente para su propio bien, así como la última incorporación, un hiper-activa cachorra de Papillon.


Me resulta imposible decir algo tipo “por fin he terminado esta saga”,
porque estaba tan entusiasmada con que mi personaje favorito fuese el
protagonista y narrador por una vez, es decir, Ash o mi cubito de hielo, como
le llama Puck, (y eso sin contar a mi minino literario favorito: Grimalkin) que
el llegar al final de la novela y leer los agradecimientos fue una gran decepción
para mí.
La autora, ya para abrir el apetito, entre The Iron Queen y The Iron Knight
ha escrito un relato extra llamado Travesía de Verano y que también viene
incluido en el libro (todo un detallazo que yo por lo menos adoro, pues sino no
habría podido leerlo), en el que Puck, con su característico buen humor, toma
las riendas de la narración y nos lleva a dar un paseo por la corte de Verano
junto a Ash.
Grimalkin no le prestó atención.
-Quería saber por qué estabais buscándome, para saber si me convenía
dejarme ver. O no –resopló y me miró ladeando la cabeza-. Pero, ciertamente, no
esperaba de ti una petición como esa, príncipe. Qué… interesante.

Es algo complicado no empezar a spoilearos y deciros lo mucho que he
llegado a sufrir en según qué partes de la novela, os lo aseguro. Lo único que
puedo llegar a explicaros sin miedo a que me asesinen por spoileadora es que todo
lo que sucede en este libro, es decir, la aventura que vive Ash, es
precisamente para intentar cambiar el final del tercer libro y conseguir que
todo acabe de una manera completamente distinta y porque no, mucho más del
gusto de todos.
Esta novela da a conocer al verdadero Príncipe del Invierno, al Ash que se
oculta bajo tantas capas de indiferencia fingida, asumida para representar su
papel en la corte de su madre. Y aunque lo parezca en un principio, ya os digo
que no es difícil adentrarse en su mente y conocer a fondo todo lo que esconde
su corazón.
-El alma es la esencia de lo humano. Es lo que nos hace falta para
convertirnos en mortales, de ahí que no podamos entender verdaderamente a los
humanos. Surgimos de sus sueños, de sus temores y sus fantasías. Somos el fruto
de su corazón y su mente. Sin alma, somos inmortales, y sin embargo estamos
vacíos. Recordados, existimos. Olvidados, morimos. Y cuando morimos, nos
desvanecemos sin más, como si nunca hubiéramos existido.

No os voy a decir si el final del libro me ha gustado o no, porque creo que
es lógico que si os digo que sí ya sabréis por dónde van los tiros, así que lo
único que voy a mencionaros es que este libro es, por decirlo en una palabra:
brutal.
Lo único que espero y deseo es que se decidan a publicar el spin-off de la
saga, (así como la historia extra de San Valentín) el cual por lo visto está protagonizado
por Ethan, el hermano de Meghan, pues yo, sinceramente, me he quedado con ganas
de más.
Eso sí, el hecho de que esta saga consiga ponerse como una de mis
favoritas, es indiscutible. Y lo de que os la recomiendo encarecidamente
también, así que ya lo sabéis, ahora no tenéis excusa para no leérosla de
golpe, pues ya podéis disfrutar de los cuatro libros de la saga juntitos y preparaditos
para leerlos y disfrutarlos como se merecen: a lo grande.
5/5


Nos leemos!!
Muchas gracias a la editorial por el envío del ejemplar
Ay, Wen ¿y cómo gozamos comentándolo por Twitter? aunque aveces estabas tentada de spoilearme, ¿eh? XD
ResponderEliminarLa verdad es que también lo he disfrutado mucho.
Besos alados,
Lu
Como lo sabes jajaja
EliminarEs que es genial >.<
Ains qué ganas de ponerme con él... aunque por otro lado me da penita... me gusta tanto esta saga... :(
ResponderEliminarGracias por volver a comentar :*
EliminarY a ver si te lo lees yaaa!! jijijij
Se comenta las veces que haga falta!!! :*
EliminarSi puedo los pido por navidades y los leo toditos jiji a ver si al final lo hago así porque la verdad que cada vez le tengo más ganas. un besan
ResponderEliminarNo me llama nada, pero como te ha gustado tal vez le de una oportunidad :S
ResponderEliminarBesos! :)
Tengo muchísimas ganas de leer esta saga! Besos!!
ResponderEliminarQué ganas le tengo!!
ResponderEliminarVeré si puedo encontrar su primera parte en la biblio.
Gracias por la reseña.
Besos.
Cariñeteeeeeee!
ResponderEliminarte he nominado a un premio para que lo realices, si es así avisame para leerlo :)
un besazo
lecturalizandoelmundo.blogspot.com.es
Lo tengo en cuenta guapa, muchas graciaaaaaaaaas!!!!! ^^
Eliminar¡¡Qué ganas de leerlo!! Que el tercero se quedó... OMG!
ResponderEliminarY que traigan todo, eso eso :3
Tengo que hacerme con la saga pero estoy pensando en comprarla en inglés, más que nada porque me va a salir mucho más barata.
ResponderEliminar¡Besos!